Vamos a empezar por algo que preocupa a miles de ciudadanos: cómo recuperar lo pagado de más por la existencia de cláusulas suelo en los préstamos hipotecarios.
Como es bien sabido, en el año 2013 el Tribunal Supremo declaró la nulidad de las cláusulas suelo contenidas en los préstamos hipotecarios que suscribían determinadas entidades bancarias, que impedían a los ciudadanos beneficiarse del escenario de bajos tipos de interés por cuanto, cuando el euribor más el diferencial pactado con el banco llegaba a determinado límite mínimo, se aplicable dicho mínimo como tipo de interés. Estas cláusulas fueron declaradas abusivas por cuanto los ciudadanos no fueron adecuadamente informados de su contenido, y eran cláusulas impuestas, no negociadas, por el banco. El Tribunal Supremo limitó la nulidad de dichas cláusulas a la fecha de la sentencia y ahora el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dicho que lo que es nulo, es nulo desde el principio, lo que justifica la devolución de lo pagado por dichas cláusulas suelo antes de 2013.
Ante el presumible aluvión de demandas judiciales contra las entidades bancarias, algunas de las cuales se han resistido hasta fechas recientes a suprimir sus cláusulas suelo, el Gobierno va a aprobar un procedimiento extrajudicial vía real decreto, lo que en el fondo implica la obligatoriedad de su cumplimiento, según informa ABC. El procedimiento fijará los plazos y las garantías que regularán la devolución. El objetivo sigue siendo, según el Ministerio de Economía, resolver con celeridad las reclamaciones y reducir la litigiosidad. En todo caso, la letra pequeña de ese procedimiento todavía se está estudiando, no solo en Economía sino también en el Ministerio de Justicia.
La intención del gabinete dirigido por Luis de Guindos era aprobar un código voluntario de conducta para los bancos como anexo a un real decreto en Consejo de Ministros del pasado viernes. Sin embargo no logró el apoyo del PSOE, que reclamaba una normativa más exigente con la banca y que, además, se aprobase como proyecto de ley. Por eso, y hasta lograr el respaldo parlamentario necesario, el Gobierno pospuso su aprobación a la próxima reunión interministerial, que se celebrará el próximo 13 de enero, fecha que se mantiene en la agenda.
Ahora bien, y según fuentes financieras, la revisión de esos planes iniciales responde además a que el código ideado por el Ejecutivo se encontró con el rechazo frontal del sector financiero, que inicialmente, sin embargo, había manifestado en privado su voluntad de asumirlo. Las entidades consideraban que el código, pese a su supuesta voluntariedad, les obligaba a declarar automáticamente abusivos y nulos todos sus contratos y devolver todo el dinero, y les impedía valorar y negociar cada caso particular y defender sus intereses y los de sus accionistas.
El Gobierno es consciente de que, por muy obligatorio que sea el procedimiento que se acabe estableciendo por real decreto, no puede imponer una devolución generalizada de ese dinero. Tanto los ministros de Economía y Justicia como el presidente del Gobierno han dicho en público que, a pesar de que querer acelerar la devolución y reducir la litigiosidad, este es un asunto relativo a la relación privada y personal de las entidades con sus clientes.
Por tanto, la fórmula que se estaría estudiando ahora, apuntan las fuentes, es una planteada desde Justicia, y que pasaría por que el cliente afectado debería hacer una primera reclamación a su banco —a resolver por este— antes de acudir a los tribunales en caso de que la entidad responda de forma negativa. Por tanto, los plazos y garantías que fije el procedimiento se referirían a condiciones que favorezcan esas negociaciones como alternativa a los tribunales en una suerte de arbitraje interno. El procedimiento también permitiría a la banca devolver esas cuantías como una reducción de los intereses y el principal pendiente por abonar, y no como un pago en efectivo en el momento, lo que le permitiría prorratear el impacto de ese reintegro en las cuentas.
Nuestro despacho se compromete a seguir informando sobre este asunto, y se pone a disposición de todos los afectados para iniciar los trámites para la recuperación de los intereses pagados de más como consecuencia de las cláusulas suelo, empezando por la reclamación extrajudicial al banco.